La Casa Blanca reconoce el potencial de la IA, tanto por sus beneficios como por sus riesgos. Aunque la IA puede ser sustancial para mejorar la productividad, la innovación y el desarrollo, su uso inadecuado podría agravar problemas sociales como el fraude, la discriminación, los sesgos y la desinformación; así como también, desplazar y atentar contra los derechos de los trabajadores; favorecer monopolios, y generar amenazas contra la seguridad nacional. Para aprovechar los beneficios de la IA, es fundamental mitigar estos riesgos, lo que requiere una acción coordinada entre el gobierno, el sector privado, la academia y la sociedad civil. La administración del presidente Joseph Biden promueve el uso y desarrollo de la IA acorde con ocho principios fundamentales:
- La inteligencia artificial debe ser segura y confiable. La orden promueve el fortalecimiento de las evaluaciones y regulaciones en materia de seguridad previo al uso y aplicación de estas tecnologías. Para mitigar estos riesgos resulta necesario implementar evaluaciones estandarizadas, políticas y mecanismos que permitan probar y entender su funcionamiento, especialmente en áreas críticas como la biotecnología, la ciberseguridad, la infraestructura crítica y otros peligros para la seguridad nacional.
- Promover la innovación responsable, la competencia y la colaboración. Este esfuerzo requiere inversiones en educación, formación, investigación y desarrollo en IA, al tiempo que se abordan los desafíos relacionados con la protección de la propiedad intelectual. El Gobierno Federal apoyará programas que impulsen el desarrollo de nuevas empresas y tecnologías, fomentando un ecosistema donde los beneficios de la IA generen oportunidades para pequeñas empresas, trabajadores y emprendedores.
- El desarrollo y uso de la IA debe respaldar a los trabajadores. No debe implementarse en menoscabo de los derechos de los trabajadores, esto incluye, deterioro de condiciones de empleo, socavar la competencia para empobrecer el mercado laboral, vigilancia indebida de los trabajadores, así como riesgos para la salud y la seguridad. Deben considerarse las opiniones de sindicatos, educadores y empleadores para apoyar la utilización responsable de la IA con el fin de mejorar la calidad de vida de los trabajadores.
- Las políticas de la IA deben promover la equidad y los derechos civiles. El uso irresponsable de los sistemas de inteligencia artificial puede amplificar las disparidades y crear nuevas formas de discriminación. Es esencial implementar políticas que protejan contra la discriminación y los abusos, incluso en el sistema de justicia y el Gobierno Federal. Solo de esta manera, los estadounidenses podrán confiar en que la IA promueve los derechos civiles, las libertades, la equidad y la justicia para todos.
- Protección de los consumidores que utilizan la IA. El uso de la IA no exime a las organizaciones de sus obligaciones legales ni de las protecciones al consumidor. El Gobierno Federal hará cumplir las leyes y principios de protección al consumidor, especialmente en sectores críticos como la salud, los servicios financieros, la educación, la vivienda, el derecho y el transporte.
- La IA debe proteger la privacidad y las libertades civiles de los ciudadanos. La IA facilita la extracción de información confidencial sobre identidades, ubicaciones y hábitos personales, lo que incrementa el riesgo de explotación y exposición de datos. Para enfrentar este desafío, el Gobierno Federal garantizará que la recolección, uso y almacenamiento de datos se realicen de manera legal y segura, mitigando los riesgos para la privacidad y la confidencialidad.
- Regular el uso de la IA por parte del Gobierno Federal. El Gobierno fortalecerá sus capacidades para utilizar responsablemente la IA. Se implementarán medidas para garantizar que todos los empleados del gobierno reciban la capacitación adecuada sobre los beneficios, riesgos y limitaciones de la IA en sus respectivos puestos de trabajo. Además, se modernizará la infraestructura tecnológica en el manejo de información, asegurando la adopción y uso responsable de la IA, respetando los derechos del ciudadano.
- El Gobierno Federal debería dirigir el progreso social, económico y tecnológico a nivel global. La colaboración internacional es esencial para establecer una estructura global común que gestione los riesgos de la IA y aproveche sus beneficios. El Gobierno Federal trabajará para fomentar principios de seguridad y protección de la IA a nivel global, incluso con naciones competidoras, liderando conversaciones clave para asegurar que la IA beneficie a todos, en lugar de agravar desigualdades, amenazar derechos humanos o causar daños.
Para más información, puede consultar la Executive Order on the Safe, Secure, and Trustworthy Development and Use of Artificial Intelligence.